Un chiste fuera de lugar en la pasada entrega de los premios Oscar, hizo visible la lucha que la actriz Jada Pinkett, de 51 años, ha venido afrontando desde años sobre su alopecia, una condición que como ella, muchas mujeres lo experimentan, pero que no se atreven a hablar y que emocionalmente les afecta en sus vidas. 

De acuerdo con la Fundación Mexicana para la dermatología, en México, al menos 20 millones de personas enfrentan este problema y de ellas, 3 de cada 10 son mujeres. La alopecia puede iniciar a los 20 años y alcanzar su pico máximo alrededor de los 50. 

A diferencia de los hombres, la caída del cabello en las mujeres se da de forma distinta y estos son los tipos de alopecia más comunes: 

– Androgénica,  que afecta la zona central de la cabeza. Es la más frecuente y se debe a un desorden hormonal que adelgaza el folículo y hace el cabello pierda su densidad. 

– Frontal fibrosante, la caída es visible en frente y sienes. Es autoinmune y destruye los folículos de la frente, ampliándola, causando picor y enrojecimiento.

– Areata,  afecta por zonas o parches. Es autoinmune; destruye los folículos sanos, provocando que el pelo se caiga en mechones y deja zonas calvas.

– Difusa, que desencadena una caída brusca y generalizada del pelo, Hace que el pelo se caiga de manera abundante, al saltarse la etapa de crecimiento.

Mientras los hombres con calvicie son aceptados, las mujeres están fuera del prototipo de belleza, haciéndolas sentir que no son mujeres; por ello, es importante evitar cualquier tipo de violencia, como comentarios, miradas, etc., para reducir el impacto emocional.